“Era el año 97 y adoptar una dieta sin TAAC fue algo realmente difícil, porque encontrar productos gluten free era una tarea de locos”
Compartir nuestras historias con todas ustedes fue algo que nos cambió la vida; no solo porque nos sentimos abrazadas y acompañadas, sino porque, también, conocimos muchas de sus historias.
Por eso hoy queremos compartir la historia de Lucía, quien convive con la celiaquía desde los trece años.
Si vos te sentís identificada con este relato, escribinos ¡Nos encantaría conocer tu testimonio!
¿CELIAQUÍA Y EPILEPSIA?
Soy Lucia de Zavaleta, vivo en Ramallo, tengo treinta y nueve años y a los catorce fui diagnosticada con celiaquía. Aunque el camino al diagnóstico no fue muy común que digamos. Cuando tenía trece comencé a tener ataques de epilepsia.
¿Se preguntarán cómo llegamos de la epilepsia a la celiaquía? Bueno, los ataques se hicieron frecuentes y con mis padres tuvimos que andar de médico en médico, hasta que logre ser medicada.
Sin embargo, al tiempo, los ataques continuaron y alguien nos dijo que quizás en la parte de neurología del Garraham nos podían ayudar. Así que eso hicimos, viajamos a Capital Federal, fuimos al hospital y logramos que nos atendieran. Allí nos dijeron que existe una relación muy estrecha entre la epilepsia y la celiaquía, derivándonos, directamente, con un gastroenterólogo. Tras una biopsia, el diagnóstico de celiaquía fue positivo.
Era el año 97 y adoptar una dieta sin TAAC fue algo realmente difícil, porque encontrar productos gluten free era una tarea de locos. En Ramallo había solo una marca, llamada Kapac, que hacía unas galletitas de harina de arroz, y algún que otro pan. Todo lo demás había que buscarlo en Buenos Aires ¡Y a precios altísimos!
Con el correr del tiempo, y gracias a proyectos como el de Los Cuentos De India, la enfermedad fue conociéndose más y más, y cada vez más personas fueron diagnosticadas. Surgieron más marcas y más productos y hasta llegó una ley.
Por eso agradezco a las hermanas Salazar por invitarme a contar mi testimonio, y también por poner el tema en boca de niños, padres y docentes.